lunes, 28 de mayo de 2012

Curiosidad Dominguera

La gente mientras viaja en colectivo piensa en qué piensa la gente mientras viaja en colectivo.

domingo, 20 de mayo de 2012

Aguanieve


Las nubes enviaban sus tropas a lanzarse desde lo más oscuro del cielo. Luego de la señal del relámpago, las gotas prepararon su ataque, inflándose y tomando coraje.

El trueno era la campanada esperada para saltar a la nada. Fue entonces cuando un millar de gotas iracundas, caían del cielo para cumplir su misión kamikaze, cayendo con una irreversible fuerza que las hacía sentir de acero. Confiadas por su impecable caída a gran velocidad, empujadas por la gravedad misma, buscaban destruir todo lo que tocaran en su caer.

Al impactar, fueron muriendo de a una, en breves explosiones que lograban apenas a mover el pétalo de una flor. Juntas, habían logrado crear algunos charcos, regar pequeñas macetas y hasta mojar el caparazón de una tortuga hasta volverlo más oscuro.

Esta vez había sido en vano. No contaban con que el planeta era más duro de lo que creían.

Pero la lluvia, pronto tendría su revancha...

lunes, 14 de mayo de 2012

Nota Editorial #8

Hola Queridos Lectores Abismales!

Hoy, y como en cada nota editorial, escribo para contarles cómo va todo por acá.

Esta noche, es el lanzamiento oficial abismal inmortal sepulcral y estructural del Abismito Nº3, que paso a presentar justo acá abajo:


Pide a gritos que lo leas, y aparte eleva tu CI. ¿Qué más le podés pedir a un librito?

Por otro lado, quiero agradecer a todos los que con muy buena onda fueron pidiendo abismitos. Ya fueron enviados a Neuquén, Mendoza, a la Costa Atlántica, a Tucumán y a varias localidades de Buenos Aires. Espero las fotos de los libritos en sus ciudades, para subirlas a Facebook y conquistar el mundo abismalmente!

Otro tema: El sábado que viene voy a estar leyendo algunos textos junto a otros escritores y músicos en el Octavo Recital de Poesía de La Boca Rota, en Casa Frida. Todos invitados!! Sigan este link para saber más: http://www.facebook.com/events/295782643842142/?notif_t=plan_user_joined

Sigan agregando a Facebook y ahora también a Twitter que se vienen sorteos y concursos y cosas más que copadas. 

Abrazo abismal, y espero que el frío no les hiele las ideas. Pónganse gorrito!

Salud!

Pebablds
Vicepresidente Junior

martes, 8 de mayo de 2012

Espejo Gris


El espejo no reflejaba. Simplemente no funcionaba más. Un día su dueño se despertó como todas las mañanas, y al lavarse los dientes notó que no veía su usual cara de dormido escupiendo espuma sabor mentol. Pensó que seguía dormido, y trató de despertar, pero todo era demasiado real. No estaba durmiendo, sólo estaba ante un espejo roto. Pero no roto de quebrado, no roto de haber estallado en mil pedazos y de haber rociado de siete años de mala suerte al agresor. Se había roto su alma, su función. El espejo se había cansado de su trabajo sin descanso, de las veinticuatro horas de actividad - porque los espejos reflejan absolutamente todo el tiempo, mientras haya un pequeño rayo de luz -. Obviamente era más fácil reflejar una habitación vacía, quieta, que un área concurrida con continuo movimiento. Era mucho más trabajo, más cansador. Todo más impredecible.

Pero ese día, el espejo simplemente se cansó. Se cansó de reflejar lo que veía sin tener una personalidad propia, se cansó de ser el camaleón de la realidad, una puerta transparente pero cerrada a un universo paralelo y sobre todo, se cansó de ver la cara de su dueño todas las mañanas, chorreando espuma blanca y verde por la boca, que caía y caía como un perro enfermo, sin ánimos de guardar un poco de prolijidad o de sutileza.

El espejo simplemente se había jubilado, por decisión propia. No había buscado otra pared para poder tener otra perspectiva, se había simplemente apagado. Pero un espejo que no refleja, ya no es un espejo, y eso es justamente de lo que no se percató. De golpe, se dio cuenta de que ya no era un espejo, sino una insípida plancha de metal opaco que no podía reflejar. Había perdido su esencia, su trabajo, su alma. Pero por fin podría descansar, fuera de los tornillos del mueble del baño de aquel oscuro y pequeño monoambiente.

jueves, 3 de mayo de 2012

Salamandra

- Che, hace frío.
- Si, mejor prendamos la tortuga.
- Querrás decir la salamandra...
- No, la tortuga.
- No, la salamandra.
- ¡No bestia! ¡La tortuga!
- ¡Se llama salamandra lo que te da calor!
- Tu vieja se llama salamandra entonces...
- Puto!
- Voy a traer la tortuga que me estoy helando.

Y trajo la salamandra y la prendió.