martes, 26 de junio de 2012

Pregunta Cósmica

¿Por qué cuando uno le dice a otra persona que es imposible chuparse el codo, inmediatamente ésta trata de chuparse el codo?

lunes, 18 de junio de 2012

Bajo la Parra


El olor a las uvas caídas se hacía espeso en el aire. La luz del sol buscaba los recovecos entre las hojas para llegar al mosaico de baldosas blancas y rojas, desteñidos por los miles de pasos que habían soportado. 

Los ladridos se atenuaban por la distancia, y a lo lejos, algunos graznidos interrumpían la calma en el aire. La brisa, leve, sorteaba las hojas, los racimos, las ramas y e incluso a algunas abejas que se acercaban a trabajar.

Las moscas también se acercaban, y se acumulaban entre los racimos del piso, caídos varios días atrás. Una jaula grande, vacía, mecía algunos alambres que sonaban levemente. 

Los sonidos metálicos de los cubiertos a lo lejos, gritaban que el mediodía estaba cerca, y el olor a tortilla confirmaba que faltaba poco para comer.

Algún que otro auto pasaba por la calle, a unos metros, invisible desde esa posición por las espesas enredaderas que trepaban por los alambres que daban al jardín. Los mismos alambres que hacían de estructura para la parra que cubría todo el patio.

El calor de los pocos rayos de sol que caían, bastaba para que sólo necesite una remera, que por cierto tenía grandes manchas de barro. Con la respiración agitada, transpirando de tanto correr, me encontraba en el piso, con los brazos extendidos, y una indeleble sonrisa en mi cara.

viernes, 15 de junio de 2012

El Mínimo


Iba sentado en el colectivo en el penúltimo asiento, ese que está justo adelante de la puerta. Mi favorito sin dudas, escuchando algunas canciones que no recuerdo en este momento. Un hombre de unos 70 años, con la boina en la mano y un saco azul marino que lo protegía del tortuoso frío de las ocho de la noche de un julio helado, sube y pide $1,10 al colectivero. El mínimo. Lo que alcanza para unas cuadras.

Al llegar a esas pocas cuadras, donde el boleto le permitía ir, se paró, toco el timbre, y cuando el colectivo se detuvo, bajó, e inmediatamente se apresuró a llegar a la puerta delantera de nuevo, para volver a subir, con su boina y su saco. Pidió nuevamente $1,10 y volvió a sentarse.

La escena se repitió una vez más. El viejo se paró al llegar a la cuadra límite que el boleto le permitía bajar, tocó timbre, descendió, y corrió como pudo hasta la puerta, para subirse nuevamente, pagar $1,10 y sentarse, como en un bucle casi surrealista.

Una vez más, y otra más, el viejo bajaba, luego subía, pagaba $1,10 y volvía a sentarse.

Al chofer no parecía moverle un pelo que el viejo suba y baje y vuelva a subir una y otra vez. En un momento hizo cara de "este viejo loco..." pero no dijo nada y se limitó, con una frialdad digna del invierno en el que estaba sumergido, a cobrarle el boleto que el viejo pedía.

En un momento, el colectivo pasó la cuadra límite y el viejo no bajó. Pasaron tres cuadras más. Nada. Otras dos. El chofer lo miraba por el retrovisor, incómodo. Hasta que respiró, tomo aire, y le dijo "señor, su boleto llegaba hasta Alvear... diez cuadras atrás". El viejo, con una calma casi budista y una calidez de sonrisas, se puso la boina, le agradeció, se disculpó, y bajó para no subirse más.

Lo vi de espaldas mientras caminaba despacito hacia la oscuridad que proponía la niebla, temblando un poco por el azote del frío.

lunes, 11 de junio de 2012

Nota Editorial #9

Estimados amiguitos abismales:



Tengo el agrado de comunicarme con ustedes, para comentarles que este querido espacio acaba de iniciar su cuarto año de vida. En este cuarto año dimos vida a muchas cosas, por ejemplo al Facebook , al Twitter , a los queridos abismitos!

Y se vienen otras quizás más geniales, quizás no, pero van sumando un número grande de cosas! Y eso es lo importante. Tener muchas! El gran Woody Allen, decía que "el 90% del éxito es insistir", así que seguiré por acá, escribiendo cosas que creo que deben ser escritas, para sumar.

Todo va indicando que la Dominación Mundial (sí, en mayúsculas) es casi imposible de detener.

¡¡Gracias a todos!!

Au revoir!

Pablix Pebablds
Vicepresidente Junior

domingo, 3 de junio de 2012

Nuevo


- Che, ¿te gusta este pantalón que me compré?
- No... la verdad que no.
- ¡Pero lo pagué seiscientos pesos!
- Pero... te queda como el orto.
- Callate, ¡vos no entendés nada de nada!
- Entonces, ¿Para qué me preguntàs?
- Pensé que ibas a ser más inteligente...
- Tenés menos idea de pantalones que Mickey Mouse de vodka.
- Uh, tomamos un vodka?
- Dale, pero sacate esos lienzos ya, que me dan asco.